La pandemia. La tempestad. Entre el quedarse en casa, la liturgia y las formas de lo popular. Falsos binomios. La muerte, la vida. El aplauso, el agua (no) potable.
Todo junto. Pero no.
La cuarentena en Zavaleta, el Conurba virus. La construcción del miedo, de la comunidad. Formas comunes de una excepción vuelta norma, normalizada.
Pero no.
La desigualdad irrrumpe. Las formas de la resistencia, de la soberanía también. Donde el cuidado de sí es (y no es) el cuidado de todxs. Indagar las (im)potencias en medio de la tempestad.
Comienzo y fin.


Falso Binomio

POR JULIETA LUQUE. «Me di cuenta que le perdí el miedo a la muerte, cuando en la previa de la cuarentena, Lu termino su tratamiento, dándole ella un scrown a la muerte, con la misma intensidad con la que va tejiendo con otrxs redes de solidaridad posta.»

La tempestad, la peste y las ruinas del mañana.

POR MARÍA VICTORIA RAÑA. «En estos días hace falta un virus bastante más leve que la peste bubónica para poner de manifiesto que existe la posibilidad de que no lo sepamos todo. Que nuestros cuerpos siguen importando y donde hay vida nunca habrá certidumbre. Nuestra relación humana con la incertidumbre no puede ser conjurada por ningún logaritmo.»

Zavaleta: crónica de un día en cuarentena.

Por FABIAN BENITEZ. «Jueves 26 de marzo de 2020, son las 9 de la mañana, las calles se ven vacías y el sol se eleva entre las estructuras de ladrillos de monobloc por encima del barrio de Barracas; el silencio se hace notar, pues, si hay algo que nunca identificó a este barrio fue el silencio, pero ahora se debe a que todos están descansando, porque la noche fue larga»

Conurba Virus. O la (de)construcción del miedo

Por RICARDO ESQUIVEL y SEBASTIÁN RUSSO. «Quedarte en casa» es la frase. El hashtag. Lo incuestionable. Y de hecho es así. Es el modo para que el virus no avance. No mate, o lo haga en proporciones menores, controlables. Es así, en la urbe. Pero qué sucede cuando tal frase es impracticable.»