SANTIAGO HABER AHUMADA. Los periodistas como Alfredo llegan a sus casas con la boca seca y cansada, pero con una sonrisa, porque lograron unir conceptos opuestos en frases emotivas: queremos paz, por eso merecen más balas. Los periodistas como Alfredo apagan el fuego todos los días, y cuando llegan a sus casas, sonríen, porque saben que sus mangueras solo tiran nafta